UNA VIEJA ENFERMEDAD, UNA ALARMANTE REALIDAD, UNA INCOMPETENCIA LEGENDARIA
En nuestra cultura, es muy fácil observar, que el ciudadano promedio (se me quedó la frase de Metroman, en Megamente) se siente enfermo solamente cuando deja de trabajar, deja de producir, como si su única función en esta tierra es trabajar y trabajar para subsistir, como si hubieramos heredado que la actividad por sí sola justifica nuestra existencia, y no detenerse de vez en cuando a evaluar nuestra salud, nuestra vida, nuestros proyectos. Y esto es particularmente grave con enfermedades infectocontagiosas de alta peligrosidad, como la tuberculosis, pues si un padre de familia esta enfermo, y no se trata precozmente, empezará a contagiar a sus hijos. Y como advierten, la mayoría no se trata, o se trata y lo deja, o se trata pero tiene que trabajar, no hay estabilidad, y ni modo, hasta donde de el cuerpo, sin advertir que se condena solo y luego con sus secuelas a toda su familia.
Pero este asunto no es exclusivamente responsabilidad del paciente, es obvio darse cuenta, que el empoderamiento, término usado por las enfermeras y otros administradores cómodamente ubicados en un sillón, que indirectamente acusa al paciente de no cuidarse, y le traslada la carga de la enfermedad en vez de hacer un análisis superficial del trasfondo complejo de un paciente que tiene que dar de comer a us hijos. Y por tanto, es responsabilidad del estado, si dice serlo, evitar que suceda una tragedia sanitaria. Aunque parece que al Sr. García, y el Sr. Ministro Ugarte poco o nada les interesa lo que pasa con la población excepto cuando inaguran obras o captan votos con dinero del pueblo.
El 16 de diciembre se publica en Caretas un artículo acerca de la preocupante y apocalíptica realidad sobre la tuberculosis, una realidad que averguenza. En este articulo se entrevista a dos neumólogos, uno es el Dr. Javier Diaz, del Hospital Cayetano Heredia, y otro es el Dr. Del Castillo, del Instituto del NIño. Lo curioso es que la entrevista fue ¡hace 6 meses! y recién lo publican ahora. Aquí los datos
Aunque no se tienen cifras oficiales de los últimos años, solo en el MINSA, durante el 2006, en Lima y Callao se reportaron 16,499 casos de TB, superando a países como Colombia, Ecuador, Argentina, Chile en todo su territorio. Además, mantienen una alta concentración de la enfermedad: 170 casos por cada 100,000 habitantes. Esta es la tasa de incidencia más alta de América y supera a Haití (150), Bolivia (95) y Guyana (95), países con alto índice de pobreza.
Siguiendo los datos del 2006, regiones como Loreto, Arequipa y La Libertad también ocupan los primeros lugares en casos de TB, superando a más de la mitad de países americanos. Solo la DISA-Lima Sur, que abarca los distritos de Barranco, Chorrillos, San Juan de Lurigancho, Villa María del Triunfo y Villa El Salvador, tiene más casos de Tuberculosis que Chile y Paraguay ¡juntos!.
Siguiendo los datos del 2006, regiones como Loreto, Arequipa y La Libertad también ocupan los primeros lugares en casos de TB, superando a más de la mitad de países americanos. Solo la DISA-Lima Sur, que abarca los distritos de Barranco, Chorrillos, San Juan de Lurigancho, Villa María del Triunfo y Villa El Salvador, tiene más casos de Tuberculosis que Chile y Paraguay ¡juntos!.
Ese mismo año los casos de tuberculosis multidrogoresistente TB- MDR llegaron a 3,972 a nivel nacional. Un preocupante avance de la enfermedad si tenemos en cuenta que Brasil y México, que nos superan largamente en población, apenas alcanzaron 1,464 y 1,564, respectivamente. Haití, la nación más pobre de las Américas, bordeaba los 1,000 casos. Esta situación solo es comparable a la experimentada en países de África como Mozambique, Tajikistán, Zimbabwe, Costa de Marfil y Ghana. Es más, si sumamos los casos reportados en Ecuador, República Dominica, Argentina, Guatemala Colombia, Uruguay, Paraguay y Chile, seguimos manteniendo el mayor número de casos de MDR.
Eso no es todo, hasta agosto del 2008 se conocían 192 casos de tuberculosis extremadamente resistente TB-XDR. La cepa resistente se concentra al menos en 80% en Lima y Callao. Los puntos más críticos durante ese año fueron los distritos de El Agustino, La Victoria, Ate, Santa Anita, San Juan de Lurigancho y el Cercado de Lima. Por si fuera poco, los casos de personal médico y servidores de salud contagiados van en aumento. Hasta el 2008 se notificaron 143 casos con TB-MDR. Por ello se exige que sea considerada como enfermedad ocupacional y esté sujeta a indemnización. ¿Quien mantiene a la familia si el padre se enferma y es quien trabaja?¿Acaso los médicos no son seres humanos?
Los datos de TB-MDR del MINSA en Lima corroboran que el 60% de la población con TB es masculina y casi todos pertenecen a la Población Económicamente Activa (PEA). Es por eso que un alto porcentaje abandona el tratamiento y se convierte en agentes de contagio ambulantes. Un enfermo de TB puede contagiar entre 10 y 15 personas. al año. Mientras el número de tuberculosis en el Perú se incrementa de 4 a 6 por hora, surge la pregunta ¿estanos a tiempo de superar esta tragedia anunciada?
No sólo este tema es delicado e importante, sino que el propio Director de Salud de las Personas del MINSA hizo un informe para solicitar que se declare en emergencia sanitaria nacional, y se implante medidas inmediatas. La respuesta del gobierno, fue esconder este informe y aprobar una estrategia tibia sin alertar a la población ni a los médicos, a veces pienso que piensan que el bacilo tuberculoso es del partido, como si en este tiempo de ineficiencia administrativa no van a aumentar los casos, y Sr. García, un ciudadano de segunda categoría que se enferma de tuberculosis es una tragedia que debería importarle si dice ser del pueblo, ¿o sólo es una cuestión de números para ud. o necesitamos un carnet?
Por eso, queridos colegas y amigos que leen estas líneas, es hora de elevar la voz cada uno en su sitio, y tenemos algunas herramientas como internet, fomentar foros y exigir a las autoridades locales que exijan a su vez a las nacionales, ir a la prensa, etc. Por nuestra parte vamos a organizar un foro de discusión con invitados, y a raíz de ello espero surja un pronunciamento público para demandar que se digan las cifras oficiales y se demuestre la incapacidad e indolencia negligente de los directivos del MINSA y del gobierno, que hasta debieran ir presos por favorecer con su ineficiencia la propagación de la tuberculosis-MDR. Esten atentos y espero sus comentarios.
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